MENSAJE DEL MES
Queridos clientes de Aerocardal,
Hoy queremos compartir con ustedes los logros más destacados de Aerocardal en materia de certificaciones. A lo largo de nuestra historia, hemos trabajado para contar con una serie de acreditaciones que demuestran nuestro compromiso con la seguridad de nuestros vuelos y la calidad en el servicio que entregamos.
La primera y de la cual depende todo el desarrollo de nuestros servicios es la certificación otorgada por la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) como Operador Aéreo (AOC) que nos autoriza a brindar servicios de transporte aéreo comercial con los más altos estándares de seguridad establecidos por el DAN 135. Además, contamos con el certificado como Centro de Mantenimiento Aeronáutico Aerocardal (CMA Nº260) que nos garantiza que nuestras aeronaves cumplen con rigurosos procedimientos de mantenimiento y de calidad.
Más allá de nuestras fronteras, hemos obtenido también la certificación FAA N° O2YY389Y otorgada por la Federal Aviation Administration de los Estados Unidos, organismo símil a la DGAC Chilena que regula todas las operaciones aéreas norteamericanas. Este reconocimiento valida nuestro cumplimiento de los rigurosos estándares de seguridad establecidos por la FAA. Es un honor para nosotros y una gran responsabilidad mantener vigente año a año esta certificación de la autoridad de los EE.UU.
Continuando en nuestro camino hacia la excelencia, Aerocardal cuenta desde hace años con la certificación ISO 9001-2015. Este reconocimiento verifica que nuestros servicios de transporte aéreo cumplen con los estándares tanto de procesos comerciales, atención de clientes, operacionales y de mantenimiento más exigentes de la industria, abarcando aeronaves y helicópteros para ejecutivos, vuelos charter, turismo y transporte aéreo de pacientes críticos. En Aerocardal, sabemos que ofrecer una experiencia excepcional es fundamental para su satisfacción.
Dentro de las certificaciones menos conocidas del amplio público, pero sin duda muy importante en el mundo corporativo internacional, está el programa Basic Aviation Risk Standard (BARS) de la prestigiosa Flight Safety Foundation. Su certificación establece los más altos parámetros de seguridad operacional a nivel mundial solicitado por las grandes compañías mineras internacionales a las empresas de aviación comercial para sus vuelos ejecutivos. Esto garantiza que, al volar con nosotros, están confiando en una aerolínea que cumple con las altas exigencias de las grandes empresas multinacionales. La seguridad siempre estará en primer plano.
En otro ámbito hemos obtenido y renovado año a año la reconocida certificación Argus International, líder mundial en auditoría de procesos de seguridad de traslados ambulancia. Este reconocimiento destaca nuestra solidez y compromiso en todas nuestras operaciones y procesos aeromédicos para el traslado de pacientes críticos. La complejidad y delicada misión de trasladar pacientes en un servicio “cama a cama” tanto en rutas domésticas como internacionales hace que asegurar el perfecto cumplimiento de los procedimientos tanto operacionales como médicos, son de absoluta trascendencia.
De la mano de las certificaciones de calidad, nos enorgullece contar también con la certificación SGS. Esta certificación avala nuestros procesos de seguridad aérea en términos de mantenimiento, operaciones y desempeño de vuelo. Gracias a esta certificación, hemos establecido alianzas con empresas de renombre internacional, como Barrick, BHP, Billiton y Río Tinto. Estamos listos para llevarlos a nuevos horizontes con confianza y seguridad.
Por último, nos enorgullece haber sido designados como Centro de Mantenimiento Oficial de Garantías de la prestigiosa empresa italiana Leonardo Helicopters. Esta distinción nos permite ofrecer servicios de mantenimiento especializados para aeronaves A109E, A109S y AW109SP.
En Aerocardal, estamos comprometidos a brindarles servicios de transporte aéreo excepcionales y seguros. Por eso, hemos implementado herramientas de monitoreo avanzado, como Spidertrack y Skytrac, que nos permiten realizar un seguimiento continuo de nuestras aeronaves en tiempo real. De esta manera, podemos garantizar su seguridad y brindarles una experiencia de vuelo tranquila y confiable.
En respuesta a los desafíos actuales, nos enorgullece haber iniciado hace algunos años el desafío de la inocuidad sanitaria y la reducción de las emisiones de carbono. En línea con la primera, nuestro FBO ha sido acreditado con el Estándar Safety 1st Clean™, elaborado por el Comité de Seguridad de la Asociación Nacional de Transporte Aéreo (NATA). Este estándar nos guía en la limpieza, desinfección y operaciones de nuestras instalaciones para proteger tanto a nuestro equipo como a nuestros valiosos clientes durante esta pandemia. Y en línea con nuestra meta de compromiso con la descarbonización del planeta, contamos con el certificado “Carbon Offset” de WorldKinect Energy Services, auditado por las normas internacionales “Verified Carbon Standard”.
Gracias por elegir Aerocardal como su aerolínea de confianza. Nos enorgullece poder servirles y estamos comprometidos a seguir elevando los estándares en la industria aeronáutica.
Atentamente, Ricardo Real – CEO
NOTICIAS DE LA INDUSTRIA
Vuelos privados. Los viajes por placer crecen más que los corporativos: ¿Cuánto cuestan? ¿Cuándo convienen?
“El vuelo privado fue una gran solución y una muy buena herramienta para trasladarnos en época de pandemia, cuando había pocos vuelos que unían Buenos Aires y Punta del Este”, cuenta Roberto, sobre la primera vez que se embarcó en un vuelo de este tipo. En ese caso, lo compartió con siete desconocidos con los que dividió el total: cada uno pagó alrededor de 500 dólares el tramo.
En efecto, la pandemia de Covid-19 trajo cambios de hábitos y muchos negocios crecieron de forma exponencial a raíz de las nuevas necesidades. Ese es el caso del servicio de vuelos privados en la Argentina que, en los últimos tres años, incrementó la demanda en un 70%, según datos de la empresa 2000 Aerosistema.
Según informaron a LA NACION fuentes de Aeropuertos Argentina 2000, se realizan más de 50.000 vuelos privados por año. Este número se
Todos hablan de aerolíneas de bandera, pero… ¿qué es eso?
El debate público sobre el transporte aéreo ha ido creciendo con los años y hoy es un tema común que parece interesar a todos por distintas razones. Para algunos es un medio para hacer turismo relativamente barato, para otros es una fuente de trabajo, un símbolo de soberanía, una industria de alta tecnología, una herramienta para el desarrollo, y hay muchas definiciones más.
Pero el debate pronto deriva hacia el modo de lograr estos objetivos, el rol del Estado y de los particulares, la propiedad sustancial y otros que inevitablemente politizan la discusión. Claro que para animar un debate sobre cualquier tema, inevitablemente aparecen palabras y conceptos con cierto grado de especialización y, en este escenario, una de las más usadas es “aerolínea de bandera”.
Técnicamente, una aerolínea de bandera es una empresa designada por un país cualquiera para realizar un servicio internacional determinado, una transacción que se realiza en el ámbito diplomático.
De acuerdo con esta definición, no es necesario que sea una organización estatal y tampoco, en esta época de alianzas internacionales, que sea de la bandera del país que la designa.
Pongamos algunos ejemplos, Aerolíneas Argentinas, Flybondi y JetSmart son líneas designadas por el gobierno argentino para volar a Río de Janeiro, por eso, las tres son líneas de bandera en esa ruta. En este caso las tres son formalmente argentinas, pero una es estatal y el resto privadas. Brasil, por su parte, tiene designada a Latam, que es privada.
Se buscan pilotas: sólo un 6,6% de las licencias de vuelo en Chile está en manos de mujeres
“Nos hemos propuesto un objetivo de aquí al 2050 para llegar a una huella de carbono neutra”, dice Joaquín Toro Prieto, Jefe de Análisis de Mercados de Airbus.
Algunas crecieron viendo a su papá volar, pero otras ni siquiera soñaron surcar los cielos. Pese a la baja cantidad de de mujeres al mando de aeronaves en el país, la cifra es mayor que el promedio
latinoamericano, que llega sólo al 3,5%. Tanto las aerolíneas como el gobierno buscan aumentar la participación femenina en el mundo aeronáutico.
Graciela Cooper Godoy fue la primera chilena en obtener la licencia para volar al mando de un avión. Fue en 1930, gracias a una beca que le ofreció el comodoro Arturo Merino Benítez, fundador de la Fuerza Aérea en Chile, y estudió en la base aérea El Bosque. Pero tal como les ocurrió a miles de mujeres durante décadas, una vez que se casó, Cooper se dedicó a su familia y tuvo que alejarse de los cielos.
Según datos de la Sociedad Internacional de Mujeres Pilotos de Aerolíneas Comerciales (Iswap, 2021), sólo el 5,26% de los pilotos en el mundo son mujeres (9.746 de 185.143), mientras que en Latinoamérica la cifra cae a 3,5%. Dentro de estas estadísticas, el país líder es India, donde las aerolíneas emplean a mujeres que representan el 12,4% de su plantilla.
En Chile el panorama tampoco es auspicioso. Según cifras de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), de las 1.318 licencias vigentes hoy en día, 88 están en manos de mujeres (6,6%). Y de las licencias que extranjeros han convalidado en el país, 54 pertenecen a mujeres pilotos de un total de 689 (7,8%).
Mercado aéreo podría desacelerarse en América Latina
Reunidos por primera vez en Santiago de Chile, la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA) destaca los altos estándares de seguridad con los que operan las líneas aéreas en Chile. La ausencia de accidentes fatales en más de tres décadas son un ejemplo de un trabajo bien realizado por parte de los operadores así como también por las autoridades aeronáuticas y el Estado encargado de normar y fiscalizar la actividad.
“Estamos en Chile donde la aviación comercial -sobre 5.700 kg- hace 32 años que no sufre un accidente con víctimas fatales, manteniendo un promedio de 0 accidentes faltes por millón de despegues en el período 2018 – 2022”, expresa José Ricardo Botelho, director Ejecutivo y CEO de ALTA durante el discurso de inauguración del 12vo ALTA Pan American Aviation Safety & Operational Summit.
En el encuentro realizado entre el 12 y 14 de junio, reúne a parte importante de la industria aérea latinoamericana en la capital chilena.
Participan operadores, organizaciones de aviación civil, autoridades aeronáuticas, entre otras. Todos los asistentes coinciden que el país logra un progreso importante en la materia lo que obliga a continuar trabajando para que los estándares alcanzados aumenten y no exista retrocesos. “Lo que nos mantiene satisfechos, pero a la vez nos compromete a seguir mejorando para ofrecer a todos los usuarios nacionales, de América Latina y El Caribe y del mundo, los más altos estándares en seguridad operacional”, señala el director de la Dirección General Aeronáutica Civil (DGAC), general de Aviación, Raúl Jorquera.
La seguridad operacional corresponde a lo que la industria denomina en idioma inglés como safety. Como su nombre lo indica está relacionado a lo que guarda relación con la operación de una aeronave. En la reunión, se tratan temas relacionados con operaciones de aeronaves de más de 5,7 toneladas. En la industria aérea también está la seguridad referida a las políticas o aspectos físicos como controles a pasajeros, carga, vigilancia o defensa.
Esto, se conoce como security, punto no necesariamente abordado en el encuentro. Desde el Ministerio de Defensa, el subsecretario Víctor Barrueto, resalta la cooperación que existe al interior de la industria aérea, tanto en el país como en la región.
Su conclusión es que al término del evento, es que la aviación es segura y los pasajeros pueden tener la confianza de ello. “He tomado en cuenta la importancia y amplitud que tiene ALTA. Creo sobre todo creo que la gran consigna es cómo hacer más segura esta industria que ya lo es. Estamos muy contentos de participar”, expresa.
Servicio destacado
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